¿Sabes cómo ahorrar energía en la cocina?

Empieza a reducir el consumo de energía en tu cocina con estos trucos que tenemos para ti.


Ahorrar energía en la cocina

La cocina es uno de los lugares donde más se consume energía debido a la presencia de diferentes artefactos electrónicos,

Hablemos de la nevera

- Fíjate cuántos años de uso tiene tu nevera, una de más de 10 años puede gastar el doble de energía y una de 20 años puede consumir el triple, en relación con una nevera nueva. La combinación del tiempo y tamaño determinan el costo y el ahorro.

- Ajusta el termostato a la temperatura más acorde al ambiente de tu casa. No la mantengas en los niveles más altos, tampoco es recomendable que esté en los niveles más bajos, la temperatura demasiado baja aumenta el consumo de energía. En los niveles intermedios la congelación es óptima y consume menos.

- Es recomendable ubicar la nevera en lugares ventilados y frescos, no debe recibir el sol directamente y es preferible que esté alejada de aparatos o equipos que generen calor, como el horno.

- Evita sobrecargar la nevera. Si se sobrecarga, su proceso de climatización será inadecuado para la conservación de alimentos y gastará mucha más energía.

- No introduzcas alimentos calientes a la nevera. Déjalos enfriar antes de introducirlos.

Es el turno del horno microondas

- No sobrepases el tiempo de cocción de los alimentos, gastarás energía innecesaria.

- No intentes hacerlo funcionar si está dañado.

- No pongas a funcionar el horno vacío, podrías provocar daño en su interior.

- Sigue siempre las instrucciones del fabricante.

- Recuerda que un horno microondas consume menos energía que uno de resistencia.

¿Qué hay de la estufa?

- Si vas a cocinar alimentos congelados, es preferible que los descongeles previamente para evitar alargar su tiempo de cocción y consumir más energía.

- No cocines alimentos con exceso de agua. Mientras más agua se utilice, más energía se va a necesitar.

- Trata de preparar toda la comida una sola vez. Cocinar un plato primero y otro después, significa mayor consumo de gas.

- Siempre que se pueda, utiliza la olla a presión, ya que ahorra energía y tiempo.

Ahora, los lavavajillas

- Antes de hacer funcionar un lavavajillas, averigua detalles de su funcionamiento y selecciona el programa adecuado.

- Ten en cuenta que si lavas un grupo de platos a mano con agua caliente se consumirá un 40% más de energía que si se hace con un lavavajillas.

- Aprovecha al máximo la capacidad del lavavajillas. Si no es posible completarla, selecciona el programa de "Prelavado" con agua fría, porque facilita el lavado posterior.



Te recomendamos detener el programa cuando inicie el proceso de secado de la loza, en vez de ello, deja la puerta abierta. La loza se secará sola (más rápido en tierra caliente o épocas de calor) y ahorrarás una importante cantidad de energía.

Es momento de conocer los electrodomésticos infaltables: harán tu vida más fácil.


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