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Con un diseño realista y moderno, pueden darle un toque especial a cualquier espacio de tu hogar. Aquí te contamos todo sobre ellas.
Las plantas y flores artificiales no requieren de cuidados como el riego o la poda, lo que las convierte en una opción práctica para quienes desean disfrutar de una decoración verde sin el esfuerzo que implica mantener plantas vivas. Además, son perfectas para espacios con poca luz natural.
Existen diferentes tipos de flores y plantas artificiales que imitan a la perfección a las reales, desde su textura hasta sus colores. Las más populares son las suculentas, helechos, orquídeas, y rosas. Cada una de ellas puede adaptarse a distintos estilos decorativos, ya sea en interiores o exteriores.
Una de las mayores ventajas es su bajo mantenimiento. Solo requieren una limpieza ocasional para retirar el polvo que se acumula. Un paño suave o una brocha son suficientes para mantenerlas como nuevas por mucho tiempo.
Aunque las plantas artificiales pueden tener un costo inicial mayor, a largo plazo resultan ser una inversión rentable, ya que no necesitan fertilizantes, agua ni luz, y no se deterioran como las naturales. Mantendrán su aspecto impecable durante años.
