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Pero, ¿cómo escoger las mejores sin fracasar en el intento? Toma nota y ¡a elegir!
Antes de elegir baldosas, es importante que tengas una idea clara del estilo que deseas para tu casa. ¿Prefieres un estilo moderno o clásico? ¿Rústico o minimalista? Una vez que definas tu estilo, podrás elegir las baldosas que mejor se adapten a él.
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También debes considerar el uso que le darás a las baldosas. ¿Las colocarás en una zona de mucho tránsito, como la entrada o la cocina? ¿O las usarás en un espacio más tranquilo, como un dormitorio? Dependiendo del uso, deberás elegir baldosas con diferentes propiedades, como mayor resistencia al desgaste o a la humedad.
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El tamaño de las baldosas también es importante. Las baldosas grandes pueden hacer que una habitación se vea más amplia, pero pueden resultar incómodas en un espacio pequeño. Por otro lado, las baldosas pequeñas pueden resultar más seguras en zonas húmedas, como el baño, pero pueden hacer que una habitación se sienta más cerrada. Elige el tamaño adecuado para cada espacio.
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La textura y el color de las baldosas también son importantes. Las baldosas con textura pueden ser más seguras en zonas húmedas, como el baño o la piscina, pero pueden acumular más suciedad en zonas secas. En cuanto al color, debes elegir uno que combine bien con el resto de la decoración de la habitación y que no se vuelva aburrido con el tiempo.
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Considera diferentes patrones de baldosas. Un patrón interesante puede darle vida a una habitación aburrida y agregar un toque de personalidad a tu hogar. Prueba diferentes patrones antes de tomar una decisión final y elige el que más te guste y que mejor se adapte a tu estilo.
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