¿Por qué elegirlo?
Mezcla la elegancia del gris y lo acogedor del beige para lograr un tono ideal en tu decoración.
Es un color cálido, envolvente y sutil. Combina perfectamente con tonos fríos y calientes. Crea espacios cómodos, naturales y agradables a la vista. No solo queda bien en pintura sino también en muebles y pisos. Se adapta a cualquier estilo, desde los clásicos hasta el nórdico y vintage. Puedes escoger la intensidad del tono según la iluminación del espacio. Si es un lugar oscuro, un greige más claro queda bien. Por el contrario, un greige más oscuro puede usarse en espacios más luminosos.